Anabel Angus rompe el silencio y pide respeto tras su separación con Yeyo Antelo

En medio de una intensa ola de rumores y teorías en redes sociales, Anabel Angus ha decidido alzar la voz para pedir respeto y prudencia sobre su reciente separación matrimonial de Yeyo Antelo, con quien compartía no solo una historia de amor, sino también una fuerte presencia en los medios y redes del país. La noticia, que sacudió al mundo del entretenimiento boliviano, fue confirmada el pasado viernes mediante un comunicado conjunto. Sin embargo, desde entonces, ambos habían optado por mantenerse en silencio.

Fue en sus historias de Instagram donde Anabel decidió expresarse de forma más directa, dejando un mensaje claro a sus seguidores y a la opinión pública: basta de especulaciones. La presentadora y empresaria pidió con firmeza que se eviten “historias paralelas”, y recordó que esta etapa es ya suficientemente difícil como para tener que lidiar con versiones no confirmadas.

“Ya es un momento difícil y queremos cuidar lo que el día de mañana nuestros pequeños vean en redes sociales sobre sus padres”, escribió Anabel, mostrando su preocupación por la exposición mediática del tema y el impacto emocional que esto podría generar en el futuro de sus hijos.

Este mensaje, cargado de sensibilidad y madurez, fue también una manera de agradecer a todas las personas que le han enviado mensajes de apoyo y contención. “Gracias por estar ahí”, concluyó la conductora, en un gesto que fue muy valorado por sus seguidores, quienes inundaron las redes con muestras de solidaridad.

Desde que se conoció la noticia de la separación, las redes sociales se convirtieron en un hervidero de teorías sobre los posibles motivos del distanciamiento. Algunas versiones incluso apuntaban a terceras personas, mientras otros señalaban presiones laborales o diferencias personales. Sin embargo, hasta el momento, ninguno de los dos ha confirmado detalles específicos, manteniendo el enfoque en preservar su intimidad y la estabilidad emocional de su familia.

Anabel Angus y Yeyo Antelo eran considerados una de las parejas más emblemáticas de la farándula boliviana, y su ruptura ha generado un fuerte impacto mediático. No obstante, con este pronunciamiento, Anabel busca marcar límites claros entre la vida pública y la vida privada, recordando que, aunque son figuras expuestas, siguen siendo seres humanos que enfrentan procesos dolorosos y merecen vivirlos en paz.

Lo que queda claro es que Anabel, más allá de su rol frente a las cámaras, demuestra una vez más su fortaleza emocional y su compromiso con su familia, priorizando el bienestar de sus hijos por encima de cualquier titular. La reflexión también sirve como recordatorio para los medios y la audiencia de que detrás de cada historia hay personas reales que merecen respeto, especialmente en momentos de vulnerabilidad.

Esta separación abre un nuevo capítulo en la vida de ambos, y aunque el futuro es incierto, el mensaje de Anabel deja algo claro: es tiempo de sanar en silencio y con dignidad.